
Sin un respiro, y con la emoción a flor de piel, seguimos trabajando, ayudando a los que ayudan y formando a los que forman. Estamos viviendo una experiencia de crecimiento personal que tratamos de inocular a los equipos participantes en nuestras sesiones de coaching de equipos con los equipos de servicios sociales y con las residencias de mayores, apoyados por la Consejería de Bienestar Social y en los procesos formativos para el profesorado impulsados por la Consejería de Educación. 2018 se dibuja como un año de consolidación y de crecimiento con sentido, ya que no queremos perder nuestro nivel de exigencia profesional y calidad. Deseamos seguir viendo brillar los ojos de las personas con las que trabajamos, es un signo de que todo fluye y de que cuidamos los procesos. Estamos viviendo lo que soñamos antes, como una profecía auto-cumplida.
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Cristina Martín (viernes, 02 febrero 2018 16:54)
Me parece magnífica vuestra labor... ojalá pudieseis ampliar cursos para otros colectivos...que en esta vida que llevamos "todos" hace tanta falta... enhorabuena no solo a vosotros, también a la Consejería de Bienestar Social.